Posibles nuevos recortes en las auxiliares del metal a partir de enero

Las centrales aseveran que las firmas avilesinas atraviesan una situación complicada con la nueva bajada de producción de Arcelor
Los sindicatos alertaron ayer de posibles nuevos recortes en las plantillas de las firmas auxiliares a partir de enero, cuando la cabecera avilesina de Arcelor-Mittal empezará a aplicar nuevos recortes en la producción. Los representantes de los trabajadores trasladaron ayer su preocupación al Gobierno regional, durante la reunión de la comisión de seguimiento de las auxiliares, un encuentro que se celebró en la Consejería de Industria y en la que también hubo representación de la multinacional siderúrgica y de las direcciones generales de Trabajo y de Industria del Principado.

«A partir de enero las auxiliares empezarán a definir si optan por expedientes de regulación o adoptan otras medidas para afrontar los recortes, como adelanto de vacaciones, etcétera. La situación es complicada en Avilés. En Veriña (donde se encuentra el resto de instalaciones de Arcelor en Asturias), por el momento, no hay demasiados problemas», apuntó ayer un portavoz sindical de las auxiliares, tras la reunión. Según los sindicatos, «prácticamente todas las firmas que dependen de Arcelor se encuentran en la cuerda floja». Mientras los representantes de los trabajadores consultados no dudan a la hora de calificar de alarmante la situación de las empresas que trabajan para el gigante del acero, desde el Principado realizaron un llamamiento a la calma. El director de Trabajo, Antonio González Fernández, señaló que la comarca es la más afectada por la caída de las ventas en el sector del automóvil, aunque añadió: «Nos encontramos ante situaciones coyunturales». «Arcelor-Asturias se encuentra entre las compañías en mejor situación del grupo Arcelor-Mittal. Por cuestiones de actividad y de recortes de la demanda la cabecera de Avilés afronta mayores reducciones. Confiamos en que remontará», añadió González Fernández.

Uno de los puntos fuertes de la reunión celebrada ayer lo constituyó el expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por Daorje, la primera auxiliar de Arcelor que ha adoptado esta medida, que puede afectar a unos 250 trabajadores. Tal como estaba previsto, será la Dirección de Trabajo y Empleo la que se pronuncie en unos días sobre el ERE planteado por la firma de mantenimiento y montajes industriales. Los sindicatos plantearon que Arcelor asuma parte del coste que acarrean los expedientes y mantuvieron su rechazo a la última oferta de la empresa: la salida de los trabajadores con un 90 por ciento del salario. Y es que temen que a este expediente le suceda un goteo constante a partir del próximo enero.


La plantilla de Arcelor propone medidas para evitar despidos en Baterías
El comité de empresa de Arcelor-Mittal quiere mitigar lo máximo posible las consecuencias de las decisiones tomadas por la compañía el pasado viernes. La siderúrgica anunció entonces distintas paradas en el proceso productivo de la cabecera de Avilés (baterías, tren de bandas en caliente, acería y líneas acabadoras).

El departamento de recursos humanos se reunió ayer por la mañana con los representantes de los trabajadores. Les comunicó oficialmente que Arcelor-Mittal había determinado parar las baterías 7 y 8, reducir la producción de la acería, programar distintas parálisis en el tren de laminación y reducir el trabajo de la línea galvanizado II. Asimismo, les comunicó que esta última línea, la de inspección y la de tándem I, parará también una semana en enero, otra en febrero y otra más en marzo. De toda esta serie de decisiones sólo se han cuantificado las consecuencias en Baterías de Coque. Según la empresa, si se apagan las baterías 7 y 8 sobran veinticinco personas.

Los sindicatos representados en el comité presentaron a la dirección de la compañía una serie de medidas que quieren evitar que las decisiones de la compañía corran de la cuenta de los empleados. «Todas nuestras propuestas están dentro del convenio», explicó Raúl Marquínez, presidente del organismo. José Luis Porto, de la USO en Arcelor, explicó que la preocupación mayor está, precisamente, en Baterías. «Hay muchas posibilidades de actuación y todas están abiertas», comentó. «Se puede aplicar la jornada irregular, las vacaciones, adelantar el coeficiente reductor e, incluso, hablar de traslados a Veriña. Todo antes de los despidos», añadió Porto. «A finales de semana nos volveremos a ver con la dirección para saber qué respuesta nos dan», concluyó Marquínez.